La cantante estadounidense cuenta su experiencia.
Algunas celebridades gastan sus fortunas en automóviles, joyas o bienes raíces. Barbra Streisand, cantante y actriz estadounidense, gastó sus millones en clonar a su perro dos veces después de su muerte.
Eso sorprendió a mucha gente, que no creía que tal cosa era posible. Lo es, pero (como era de esperarse), no es barato.
La clonación de perros entró en escena en 2005 en Corea del Sur con un perro afgano llamado Snuppy, que vivió hasta 2015.
Clonar a tu perro te costará 50,000 dólares.
Desde entonces, otras compañías se han centrado en la práctica, y la Fundación de Investigación Biotecnológica Sooam de Corea del Sur es uno de los líderes. Sin embargo, para replicar a tu cachorro, ese grupo te cobrará 100,000 dólares.
Eso es el doble de lo que que una compañía de clonación de perros en Texas te cobraría. Viagen Pets, en este estado, almacenará el ADN de tu perro o gato en una instalación de crioconservación.
El proceso se llevará a cabo con la unión de un óvulo donado para crear un embrión e implantarlo en un sustituto, en un periodo de seis a siete meses nacerá tu mascota una vez más.
Hasta el momento, hay una lista de espera. Los perros cuestan 50,000 dólares, mientras que los gatos están a la mitad de ese precio.
Los clones pueden parecerse a tu viejo perro, pero ¿actuarán como él o ella? Eso sigue siendo una incógnita e incluso Streisand aún no sabe la respuesta.
“Tienen diferentes personalidades, estoy esperando que crezca un poco más para poder ver si tienen los ojos marrones [de su perro anterior] y su seriedad”, manifestó la actriz en entrevista con la revista Variety.