La app de mensajería de Bridgefy incrementó sus descargas en un 4,000% en los últimos dos meses, la mayoría provienen de Hong Kong. ¿La razón? No necesita conexión a Internet.
Todo comenzó en febrero de 2019, cuando en Hong Kong se presentó a legisladores una iniciativa de ley que permitía a los acusados de algún crimen que fueran enviados a lugares donde la región no tenía un tratado de extradición.
Sin embargo, las protestas estallaron el 9 de junio con una manifestación que reunió a personas de todas las edades que se oponían a la ley, donde uno de sus medios de comunicación fue la aplicación de Bridgefy.
La ley fue anulada por Carrie Lam, Chief Executive, el 15 de junio. Pero las manifestaciones continuaron, porque señaló que no “quitaría el dedo del renglón” y por las acciones de violencia que hubo contra los manifestantes.
Entonces comenzó un movimiento –que incluso paralizó su aeropuerto por varias horas– para defender derechos humanos, democracia y autonomía, que viene en sus propias normativas contenidas en la Ley Básica que ahora se está viendo eclipsada por el legislativo.
UNA ALTERNATIVA A INTERNET
En este punto es donde entra Bridgefy, pues funciona en un país que censura y monitorea sitios y aplicaciones que utilizan Internet e incluso la red telefónica. Los manifestantes de Hong Kong encontraron una alternativa en la app de mensajería de desarrolladores mexicanos Bridgefy, que funciona a través de Bluetooth.
“La aplicación puede funcionar con o sin Internet”, señaló a Fortune en Español Jorge Ríos, CEO y fundador de la startup con patente en San Francisco.
En Hong Kong la están utilizando vía Bluetooth porque “el riesgo de que los mensajes sean leídos por terceros son bajos, tendría que estar una persona en medios de dos que se están comunicando”, agregó. Así se puede conectar de esta manera:
- Uno a uno: los smartphones se pueden conectar a una distancia de 100 metros.
- Uno a uno a larga distancia: se teje una red llamada “mesh” y se logra cuando haya más usuarios de Bridgefy conectados entre tú y la otra persona
- Broadcast: es una sala de chat dentro de la app que lleva a conversar con cualquier otra persona dentro, sin importar que sea o no tú contacto. Es la más usada en Hong Kong y durante desastres naturales.
Hasta hace una semana, la aplicación de Bridgefy tuvo 21 mil descargas en solo siete días en Hong Kong. En el último mes ha reunido 76 mil en el mismo lugar, poco más del 60% de las descargas (113 mil) que han tenido a nivel global en lo que va de 2019, según datos que dio Ríos y que fueron cotejados en Apptopia.
Bridgefy creció un 4,000% en descargas tras ser utilizada como medio de mensajería en Hong Kong.
La última cifra apenas representa el 0.01% de las descargas globales de WhatsApp en 2018, la app de mensajería más descargada en el mundo; sin embargo, la de los desarrolladores mexicanos puede funcionar sin Internet.
No es la primera vez que se utiliza la aplicación en situación de emergencia. Durante el terremoto del 19 de septiembre de 2017 en México y a la par dos huracanes (Irma y María) en Estados Unidos en el mismo mes llevaron a 150 mil descargas de Bridgefy en una semana, aseguró.
LA SEGURIDAD DEL BLUETOOTH
Quizá te preguntes sobre qué tan seguro es el manejo de datos e información por esta vía, lo cierto es que “no hay garantía de seguridad en ninguna aplicación”, expresó Jorge Ríos, aclaró que sería irresponsable de su parte asegurar que la hay.
Por su parte, el periodista Thomas Brewster señala en un artículo que la app presenta riesgos como la confidencialidad y autenticidad de cualquier mensaje enviado a través de teléfonos de terceros no confiables. Uno más son los metadatos que se recopilan y pueden identificar al usuario.
Sin embargo, la ventaja que señaló Ríos es que “si llegaras a interceptar un mensaje sería difícil leerlo, porque todo está cifrado”.
Otra plataforma similar, pero con un alcance más limitado –70 metros y hasta 10,000 dispositivos– es Firechat, de origen estadounidense.
EL ALCANCE DE BRIDGEFY
Los hechos de Hong Kong y los desastres naturales son una muestra del uso que puede tener Bridgefy en situaciones de emergencia, pero ¿qué pasaría si esta tecnología se traslada a dispositivos de lugares donde no hay Internet?
Hasta finales de 2018, el 51.2% de las personas (3,900 millones) utilizaban Internet, detalló el Informe sobre Medición de la Sociedad de la Información de la International Telecommunications Union (ITU, por sus siglas en inglés). Además, alrededor de 2,659.4 millones de personas en el mundo cuentan con un smartphone hasta este 2019, muestran datos de Statista.
Han habido proyectos para proveer de Internet a zonas remotas, entre ellos Loon de Google, globos que ofrece conectividad inalámbrica a través de globos de gran altitud. Uno más fue el de los drones solares gigantes de Facebook, pero que después abandonó la compañía.
Con esto en mente, Bridgefy podría acercar otras aplicaciones, que usualmente funcionan con Internet, a zonas remotas o de países en vías de desarrollo sin mayor gasto en infraestructura. Solo sería necesario un smartphone, explicó el CEO de la startup.
“Si desarrolladores como Google, Facebook, Uber, Tinder y de otras aplicaciones, utilizara Bridgefy, sus servicios funcionarían sin Internet y se crearía una red mesh mucho más grande y potente”, explicó Ríos.
Actualmente, la tecnología de Bridgefy la utilizan siete empresas –entre ellas Sky Alert– y 300 mil personas.
La startup está planeando hacer un levantamiento de inversión en septiembre para tener un equipo más grande (actualmente son dos personas), que incluya a ventas, y desarrolladores para llegar a otras aplicaciones y dispositivos (coches, relojes, laptops). “Queremos que nuestra tecnología se utilice para todo y la gente lo considere un standard“, apuntó Ríos.
Mientras Bridgefy esté en más aplicaciones se podrá crear una red mayor e incluso se podría cubrir una ciudad entera, afirmó el CEO.
Por otro lado, al cuestionarle si han recibido alguna advertencia del gobierno de China, Ríos dijo que no, pero que habían tenido un ataque a la página en la madrugada del martes 3 de septiembre: “nos tumbaron la página. No sabemos quién fue. Nosotros seguimos las reglas de las app stores“.
También hizo hincapié en que ellos buscan proveer de un servicio gratuito a las personas, pero que la forma en que su tecnología se emplea es ajena a ellos: “no somos políticos. No estamos a favor de ningún partido político o conflicto, estamos aquí para ayudar”.