Los líderes de las principales economías del mundo sostienen su postura antiproteccionista.
Los líderes financieros de las principales economías del mundo reafirmaron este martes su compromiso de combatir el proteccionismo y de reconocer la necesidad de “más diálogo y acciones” comerciales, durante el cierre de la cumbre del G20 en Buenos Aires, Argentina.
La postura llega días antes de que entren en vigor los aranceles de Estados Unidos a las importaciones de acero y el aluminio.
En el encuentro, los líderes discutieron los riesgos que los aranceles representan para el crecimiento de la economía mundial, una potencial guerra comercial provocada por los aranceles de Estados Unidos y las crecientes sanciones a China.
“Trabajamos en reforzar la contribución del comercio en nuestras economías”.
– Líderes del G20
Las conversaciones, según detallaron los líderes, fueron “respetuosas” y consistentes, aunque en gran parte de lecturas de declaraciones sin debate, reporta Reuters.
El G-20 acordó solamente apoyar la declaración de Hamburgo del 2017, que habla sobre luchar contra el proteccionismo, incluidas todas las prácticas comerciales desleales”.
“Reafirmamos las conclusiones de nuestros líderes sobre comercio en la cumbre de Hamburgo y reconocemos la necesidad de más diálogo y acciones. Estamos trabajando en reforzar la contribución del comercio en nuestras economías”, dijo la declaración final de los ministros del G-20.
Sin embargo, en poco disipan las preocupaciones. Este viernes 23 entrarán en vigor los aranceles del 25% al acero y del 10% al aluminio.
Pero el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, dejó en claro que los aranceles anunciados por Trump fueron una acción en legítima defensa.
“Tenemos que estar preparados para actuar en función del interés de Estados Unidos de defender el comercio libre, justo y recíproco”, dijo en una conferencia de prensa luego de las charlas, y agregó que siempre hay un riesgo de que otros actúen en reciprocidad.
Respecto al riesgo de entrar en una guerra comercial, Mnuchin dijo que Estados Unidos “no tiene miedo de entrar en una guerra comercial”, dado el tamaño de su mercado y por el hecho de que tiene un déficit comercial grande.
Por otra parte, dos funcionarios de Estados Unidos aseguran que el mandatario estadounidense también anunciará aranceles sobre hasta unos 60,000 millones de dólares en tecnología y telefonía china el viernes, para castigar las prácticas de Pekín sobre la propiedad intelectual.
Europa, lista para las represalias
La Unión Europea, el principal socio comercial de Estados Unidos, quiere quedar exenta de los aranceles a los metales como Canadá y México, pero hasta ahora no ha tenido éxito.
Por esto la Unión Europea está preparando aranceles sobre productos estadounidenses desde el whisky a los jeans y las motos Harley-Davidson.
Funcionarios europeos dijeron que una guerra comercial solo producirá perdedores y que el G20 está unido en apoyo del multilateralismo, una manera de decir que el G20 defiende resolver disputas comerciales mediante la Organización Mundial de Comercio (OMC).
“Estuvimos todos de acuerdo en que es un juego de suma negativa”, dijo el gobernador del banco de Italia, Ignazio Visco, a periodistas en el marco de la reunión. “No hubo ni una voz en contra del multilateralismo”.
Mnuchin dijo que tuvo conversaciones directas con sus contrapartes en China y que espera trabajar con Liu He, el nuevo viceprimer ministro, a cargo de las políticas financieras e industriales, sobre cómo tener mejor acceso al mercado chino.
“Creo que hay una visión general en el G-20 de que es nuestro deseo ver que China abra sus mercados para que podamos participar en ellos de la misma manera que ellos participan en los nuestros en una relación mucho más recíproca”, declaró Mnuchin.