Permitiría legalizar a 1.8 millones de inmigrantes indocumentados.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está ofreciendo una alternativa para aproximadamente 1.8 millones de jóvenes inmigrantes ilegales, pero busca medidas que limitan algunos programas legales de inmigración y fondos para la construcción de un muro en la frontera con México.
La Casa Blanca presentó un programa que evita que el doble del número de ‘dreamers’ -personas que llegaron ilegalmente al país cuando eran niños-, sean deportados, una acción que se describe como una gran inversión destinada a atraer votos que pudieran generar un acuerdo con los demócratas para aprobar la reforma migratoria.
Pero el plan incluye importantes medidas para sumar a los republicanos, incluidos requisitos que reducen el patrocinio familiar de los inmigrantes, refuerza la seguridad fronteriza y proporciona miles de dólares para un muro fronterizo, una de sus principales promesas de la campaña de Trump.
El paquete fue criticado inmediatamente por grupos a favor de la inmigración, que permitió que el plan ofreciera un mal intercambio. También fue atacado por algunos grupos conservadores, que denunciaron la expansión de una “amnistía” para los inmigrantes ilegales.
La representante demócrata Michelle Lujan Grisham, explicó que el plan de Trump utilizaba a los ‘dreamers’ como “una moneda de cambio para instaurar unas amplias políticas antiinmigrantes”.
Los ‘dreamers’ son la moneda de cambio de Trump para instaurar amplias políticas antiinmigrantes.
– Demócratas
Por otro lado, la reacción temprana de los republicanos en el Senado, donde el plan podría ser votado a principios de febrero, fue positiva. El senador conservador Tom Cotton lo calificó como “generoso y humano, y al mismo tiempo responsable”.
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Los republicanos controlan estrechamente la Cámara alta (51 contras 49) y necesitan votos demócratas para aprobar una legislación.
La lucha por la protección de los ‘dreamers’, que expira en marzo de 2018, fue una parte importante de la disputa entre republicanos y demócratas en el Senado que resultó en una paralización del gobierno federal de tres días que finalizó el lunes.
Los congresistas acordaron extender el periodo hasta el 8 de febrero, lo que dejó una pequeña ventana para llegar a un acuerdo sobre inmigración.
El plan de Trump ayuda a brindar orientación para esas negociaciones, anunció el líder de la mayoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell.
Pero las negociaciones serán duras. El senador demócrata Dick Durbin, quien ha defendido la causa de los ‘dreamers’, explicó que el plan puso “toda la agenda de inmigración de la línea dura de Trump -incluyendo enormes recortes a la inmigración legal- sobre las espaldas de estos jóvenes”.