Gracias a su expertise y altos estándares de calidad, ninguna marca se ha establecido como referente del lujo y la exclusividad en diamantes como Tiffany & Co.
Establecida en 1848, desde su fundación se distinguió entre otras marcas joyeras al ser la pionera en la introducción de gemas de gran envergadura en Estados Unidos. Con la llegada de su primera tienda, localizada en Broadway, rápidamente se convirtió en la joyería por excelencia.
Siempre comprometidos con la búsqueda de la perfección, tras más de cien años de trayectoria se mantiene a la vanguardia. Una de sus aportaciones más importantes y trascendentales es la introducción del anillo de compromiso como lo conocemos en la actualidad, con sus tantas características y estilos de diamantes.
A su vez, ha sido usado por una enorme cantidad de celebridades y figuras históricas. Esto se debe al énfasis en la calidad y la particularidad al elegir cada joya. La creación de una pieza digna de la marca tiene sus fundamentos en cuatro pilares: corte, claridad, color y peso.
La elaboración de cada una de las piezas es un proceso meticuloso que abarca desde el descubrimiento del diamante, hasta la fecha en la que se termina el diseño. Esto puede llegar a tardar hasta un año. Son únicamente los más distinguidos los que llegan a ser colocados dentro de una icónica Blue Box®.