El presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, renunció a su cargo de la institución financiera internacional, informó The Guardian.
“Ha sido un gran honor servir como presidente de esta institución, y quiero agradecerles a todos por su apoyo en nuestra misión de acabar con la pobreza en el mundo”, escribió Kim al personal del Banco Mundial en un correo electrónico el lunes por la mañana.
Kim explicó en su correo electrónico que se unirá al sector privado, donde dijo que se centrará en “aumentar las inversiones en infraestructura de los países en desarrollo”. Según el todavía presidente del Banco Mundial, la “clave para cerrar la brecha masiva de financiamiento para el desarrollo” es trabajar con el sector privado.
Antes de unirse al Banco Mundial, el presidente se formó como médico y fue cofundador de la organización sin fines de lucro Health in Partners in Health en 1987. Posteriormente, se unió a la Organización Mundial de la Salud como asesor, y luego ascendió al Banco Mundial en 2012.
Kim fue reelegido por un período de cinco años en 2017. Abandonará su cargo en el Banco Mundial el 1 de febrero, antes de lo planeado –en 2022–.
Fuentes cercanas al Banco le dijeron The Guardian que la decisión de Kim de irse fue una “decisión personal”.
Por Erin Corbet