La CEO Indra Nooyi mantuvo un paso adelante del grupo de grandes compañías de alimentos. Sin embargo, ¿podrá sacudir al sector que va perdiendo su efervescencia.
Quedó muy lejos aquella época dorada para los CEO de las grandes compañías de alimentos. Los consumidores están esquivando sus productos empaquetados y procesados. Los supermercados las presionan para reducir sus precios.
Los inversionistas activistas y la amenaza de Kraft Heinz, el rival que se ha convertido en una máquina reductora de precios ahora que está apoyada por 3G, continúan rondando la escena.
En medio de este tumulto, un grupo de CEO longevos en la industria han renunciado a sus puestos directivos durante el último año.
Pese a este escenario, la CEO de PepsiCo, Indra Nooyi, se mantiene a flote. No sólo ha sido una líder de la industria desde que obtuvo el puesto en 2006 –identificando de manera oportuna la necesidad de repensar el portafolio de la empresa, compuesto hasta entonces de bebidas azucaradas y botanas saladas–, sino que también es ya una institución en la lista Fortune de Mujeres Más Poderosas en los Negocios. Nooyi, quien ocupa el puesto número 2 en 2017, ha aparecido en nuestro listado en 18 de los 20 años que se ha realizado.
Nooyi se sentó con el equipo de Fortune para hablar sobre cómo administra al gigante de bebidas y alimentos que genera US$63,000 millones en ventas durante el periodo más disruptivo de su mandato. A continuación, extractos editados de esta conversación.
FORTUNE: Casi una docena de CEO veteranos de la industria de alimentos han renunciado en los últimos 18 meses. Irene Rosenfeld, quien planea retirarse como CEO de Mondelez este noviembre, me dijo que no va a echar de menos la naturaleza 24/7 de su puesto. Durante la adquisición de Cadbury, todo estaba bien al irse a dormir, y todo era caos cuando se despertaba. ¿Cómo has manejado tu trabajo durante tanto tiempo?
INDRA NOOYI: Es porque ella dormía durante la noche, y yo no lo hago [risas]. Me cuesta trabajo dormir, así que toda la noche recibo notificaciones de email y me levanto cada hora a responderlos.
Hay gente que progresa con eso, y hay gente que batalla con este exceso de trabajo. Yo todavía progreso. A estas alturas, ya estoy acostumbrada a este ritmo. Y me gusta.
La industria está viendo un ritmo de cambio y disrupción que jamás habíamos visto, ni siquiera cuando salíamos de la crisis financiera. Está cambiando de gran manera. Va a haber consolidación, disrupción y una sacudida en la industria. Veremos surgir a nuevos jugadores.
Podemos verlo con pesimismo, ese “¡Dios!, todo esto está cambiando”, o con optimismo al decir que probablemente este es el momento para reescribir algunas de las reglas y volver a balancear la ecuación de competencia en la industria.
Yo estoy en esta segunda opción, viendo al mundo y diciendo “qué tiempos tan interesantes”. Sólo espero tener la energía suficiente para superarlos. En este momento aún la tengo.
¿Cuáles son tus estrategias para hacer sentido de todos estos cambios?
Hay algunos libros que estoy leyendo actualmente sobre tecnologías disruptivas que te dan una idea de qué tanto está por cambiar el mundo. Lees eso y de cierta manera te mantienes sentada y piensas, “pero ese no es un mundo dentro de 10 años, ese mundo es el de hoy”.
Al hablar con [el cofundador de Uber] Travis Kalanick hace tiempo, le dije: “me da gusto que esto no va a pasar mientras yo viva”. Y él dijo: “esto va a pasar en los próximos cinco años.”
Para mí, gente como [el cofundador del fondo Andreessen Horowitz] Marc Andreessen, Travis Kalanick y [el cofundador y CEO de Airbnb] Brian Chesky son personas con quienes debo hablar una o dos veces al año. Simplemente debo de hacerlo.
Es esta hambre de conocer cómo la gente está pensando en irrumpir en tu negocio o en el mundo que te rodea.
En el tema de disrupción, ¿de qué manera la adquisición de Whole Foods por Amazon va a cambiar tu negocio en lo particular, y el del sector de alimentos en lo general?
Amazon es una de las compañías más poderosas del mundo. Está jugando de manera fantástica con tu mente, conociéndote mejor de lo que te conoces a ti mismo.
Ellos utilizarán las tiendas de Whole Foods como puntos de abastecimiento y reabastecimiento. Tienen estos espacios físicos donde pueden comprender cómo compra la gente, así que es una herramienta de aprendizaje.
Tienen Whole Foods 365, la cual es una marca muy poderosa. Van a usarla para entrar en algunas categorías que hagan sentido.
Lo que quieren es mejorar la calidad de vida de los consumidores al reducir los precios en lotes de artículos y removiendo cualquier punto de fricción. Lo están abordando de una manera muy enfocada en el consumidor, y van a ser una fuerza importante por la que todos deberíamos estar preocupados.
¿A ti te preocupa?
Constantemente. Pero uno no solamente se preocupa de ello, te vuelves parte de ello. Cuando llega un disruptor, no hay que verlo como alguien que va a llegar a matar tu negocio. Piensa en cómo va a ayudarle a tu negocio. Cuando las tiendas de dólar llegaron, todos nos preocupamos. Pero ahora tenemos un gran negocio con ellos.
¿La adquisición de Amazon cambia la manera en que PepsiCo trabaja con Whole Foods? Históricamente, no ha vendido tanto volumen de tus productos.
Sólo tenemos Tropicana, Near East y algo de productos de Quaker en Whole Foods. Ahora creo que trabajaremos con Amazon para colocar más, sin duda.
¿De qué manera estás respondiendo a los consumidores que dicen querer alimentarse de manera más sana?
Creo que la tendencia del consumidor yéndose más hacia Whole Foods y Trader Joe’s es aún muy lateral. Pero no queremos rendirnos ante ese crecimiento. Así que hemos modificado nuestra línea de productos naturales, orgánicos y libres de organismos genéticamente modificados.
¿Podríamos hacer más? Sí, aunque me preocupa la disponibilidad de materiales crudos. Al ser una compañía tan grande, si decimos que algo es orgánico, más vale que sea orgánico. Las etiquetas tienen estándares muy altos. Para el caso, es un reto de la cadena de distribución.
Investigaciones muestran claramente que la gente está preocupada por el Aspartamo como endulzante, pero cuando lo reemplazaste por sucralosa en la Pepsi de dieta, los consumidores no lo aceptaron. ¿Qué pasó?
Hay una ligera diferencia en el sabor. No es una degradación, simplemente es diferente. ¿Así que cuál es el problema? Para ser honesta, ese fue mi mayor rompecabezas.
Lo que los consumidores piensan que es sano no siempre está basado en la ciencia. Es una percepción, lo que tus amigos te dicen, la nueva historia publicada en blogs o redes sociales. Puede que algo ni siquiera esté fundamentado en hechos.
Si ves las papas fritas en Whole Foods, no son más sanas que las Sabritas. De hecho, diría que la calidad de las Sabritas es mucho mayor. Sólo porque viene en una bolsa café la gente paga más, pensando tal vez en que son naturales, orgánicas o artesanales.
¿Hay una nueva categoría a la que quieras entrar?
Va más allá de categorías que estén listas para la disrupción. Te daré un ejemplo: las bebidas calientes. Durante años, han sido café y tés. Aún no ha sido irrumpido. Pero si vas a muchas otras culturas locales, ves que beben más tipos de bebidas calientes.
Tengo que iniciar una chispa creativa allá afuera para que la gente comience a pensar diferente. No empiecen con café o té.
¿Cuál es la mejor bebida caliente que debe ser vendida entre noviembre y marzo que sea totalmente distinta, increíble, que la gente beba y piense, “¿por qué no pensé antes en esto?” Ese es un espacio que creo está listo para ser irrumpido, o para que llegue un Travis Kalanick o Brian Chesky.
Tú apoyaste abiertamente a Hillary Clinton, pero también tomaste asiento en el consejo consultor de negocios del Presidente Trump, y fuiste criticada por no salirte de él antes de que fuera desmantelado tras sus comentarios sobre el rally de supremacía blanca en Charlottesville, Virginia. ¿Cómo piensas en estos temas políticos?
Hasta que ocurra la elección, puedes apoyar a cualquier candidato que quieras. Había una candidata que representaba los valores que me gustaban, pero el día después de la elección, quien sea que haya sido electo Presidente es mi presidente. Y lo felicité por eso.
Pensé muy bien sobre entrar a estos consejos para ayudar a que el presidente pudiera debatir y discutir algunos problemas. El ciclo político opera en ciclos cortos. Los problemas y soluciones son ciclos largos. Es aquí donde los negocios pueden lidiar con ambos.
Creo que en este caso, tal vez algunos de los comentarios que se hicieron después de Charlottesville sí crearon consternación. Si CEO individuales toman acción, no le hace bien a nadie, pues entonces cada uno de nosotros se vuelve una historia mediática.
No es una decisión que alguno de nosotros se tomó a la ligera, pero las circunstancias exigían que renunciáramos como grupo.
¿Qué estuvo mal con la protesta en contra del anuncio de Kendall Jenner, que recibió demasiadas críticas?
He pensado mucho en esto porque miré el anunció una y otra vez tratando de descifrar qué salió mal, porque fue una marcha pacífica y no de protesta. Era gente feliz uniéndose. Me di cuenta que la escena que provocó mayor consternación fue la final, donde Kendall Jenner le da una Pepsi al policía, ya que esto evocó al movimiento de Black Lives Matter.
Esto me ha dolido bastante ya que PepsiCo ha sido conocida por su diversidad, además
de que ninguna persona que produjo o aprobó el comercial lo vinculó a Black Lives Matter,
lo cual fue una gran interrogante para mí. Yo no había visto el anuncio, y tomo las cosas de manera muy personal. El momento en el que vi que la gente estaba molesta, lo retiré. Y, ¿sabes qué?, no vale la pena.
¿Qué consejo darías a las mujeres que están ingresando hoy a la fuerza laboral?
Todos deben entrar a la fuerza laboral conscientes de que es un viaje largo. Las mujeres deben saber que el suyo será más rudo porque tienen otras prioridades por las que preocuparse.
Hoy, la gente puede argumentar que los hombres tienen las mismas prioridades. Es cierto, pero las mujeres nacieron con un gen extra que nos hace preocuparnos un poco más por esas cosas.
Hemos desarrollado más habilidades para escribir listas y hemos aprendido a establecer prioridades. Si no sabes cómo hacerlo, ve a un curso. Hago una lista todos los días de 50 o 60 cosas, y tacho las que voy completando.
La gente dice que hacer varias cosas al mismo tiempo no es algo muy bueno. Si yo no lo hiciera, no tengo idea de cómo sobreviviría.
Entrevista por Beth Kowitt Foto: Spencer Heyfron