¿Cómo es posible que Elon Musk haya viajado tan rápidamente de ser un visionario perturbador admirado a una persona ampliamente ridiculizada en la industria?
Vintage Musk fue el inconformista que una y otra vez mostró el futuro a otros. Ayudó a inventar pagos en línea en PayPal. Supervisó a un equipo que construyó un magnífico automóvil eléctrico sin la ayuda de Detroit. Lideró el camino hacia la exploración del espacio de manera comercial. Mostró cómo el negocio de paneles solares residenciales podría convertirse en una corriente dominante. La lista es interminable.
La lista de errores de Elon Musk de Fumbling es igualmente larga. Él escoge peleas innecesarias y distraídas con los reguladores del gobierno. Un día dice que Tesla cerrará todas sus tiendas. Luego, The Wall Street Journal informa que los propietarios no tienen intención de dejar que Tesla salga de sus contratos de arrendamiento.
Después de todo, Musk anuncia que no todas sus tiendas cerrarán. Él declara objetivos de producción que sus fábricas no pueden cumplir. Luego lo vuelve a hacer. “No podemos evitar preguntarnos si hemos visto esta película antes”, se lamenta Toni Sacconaghi, analista de Bernstein, acerca de las líneas de tiempo de fabricación que Elon Musk ha prometido para el nuevo modelo Y hatchback.
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A primera vista, Musk está demostrando todos los atributos de un administrador de objetos brillantes, un ejecutivo inexperto que persigue modas pasajeras porque se ajustan a sus caprichos o porque encubren los problemas existentes.
Pero Elon Musk no es un novato. Él ha construido negocios reales.
Por otra parte, sus críticos siempre dijeron que la fabricación de automóviles sería diferente. Es un negocio de producción en masa que requiere atención de otro mundo a la asignación de capital, la gestión laboral y el cumplimiento normativo. Con Tesla, Musk y sus colegas, deben recordar que esto no es un espectáculo de un solo hombre, en los buenos y malos momentos, entregó uno de los grandes productos artesanales de nuestros días. Convertir eso en una compañía global de automóviles requiere el tipo de habilidades que no pueden proporcionar.
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Por Adam Lashinsky
Este artículo apareció por primera vez en la Data Sheet, el newsletter diario de Fortune sobre las noticias de tecnología más importantes. Para recibirlo diariamente regístrate aquí.