El fabricante japonés de videojuegos reportó ganancias que superaron las estimaciones anuales.
El fabricante japonés de videojuegos Nintendo reportó su mayor ganancia operativa del tercer trimestre en ocho años, impulsada por la gran demanda de su nueva consola de juegos Switch.
Además anunció que esperaba que las ganancias anuales superen su estimación anterior.
La creciente popularidad de la consola híbrida portátil ha casi duplicado el precio de las acciones de Nintendo a máximos que no se veían desde hace nueve años, desde que se hizo el lanzamiento del dispositivo en marzo pasado.
Las ventas han excedido las estimaciones y esto podría hacer que la compañía supere los números de por vida de su predecesora Wii U.
Las ventas de consolas probablemente llegarán a 15 millones de unidades en el año hasta marzo y subirán a 20 millones el próximo año, anunció Nintendo, alimentando las esperanzas de que el éxito se repita con el que tuvo la primera consola Wii -misma que se estrenó a fines de 2006 y vendió más de 100 millones de unidades-.
El reto de Switch en el segundo año será atraer a jugadores que no son jugadores
– Tatsumi Kimishima
“El impulso para Switch en los últimos 10 meses ha sido más fuerte que el de Wii”, declaró el presidente de Nintendo, Tatsumi Kimishima, en una llamada con los inversionistas sobre los resultados.
“La clave del éxito de Switch en el segundo año será atraer a jugadores que no sean jugadores”, agregó.
Los analistas creen que el plan de Nintendo de lanzar Labo para la consola, una estrategia al estilo LEGO para que los niños pueden construir sobre cartulinas, atraerán a un público más joven.
“Este es exactamente el tipo de idea loca por la que apuesta Nintendo y creemos que ayudará a expandir la audiencia de la compañía”, publicó la firma Macquarie en un análisis.
Será “atractivo para una audiencia más joven que no haya sido abordada por Nintendo por algún tiempo”, señaló la firma.
Nintendo vendió 7.2 millones de consolas Switch en los tres meses hasta diciembre y elevó su previsión anual de ventas en un millón desde el estimado anterior de 14 millones de unidades.
Eso ya supera las ventas de 13.56 millones de consolas para Wii U, que estaba en el mercado desde finales de 2012 hasta 2017.
“Las ventas de consolas durante la temporada de vacaciones fueron más fuertes de lo esperado en Japón, Estados Unidos y Europa”, explicó Kimishima en la sesión informativa.
Switch o Pokemon Go, ¿qué deja más?
La demanda de Switch hizo que las ganancias operativas de Nintendo casi se cuadriplicaran a 1.07 mil millones en el tercer trimestre. Este fue el más alto que se haya registrado para el período de octubre a diciembre desde 2009.
Los resultados superaron la estimación del consenso de alrededor de 67,000 millones de yenes de seis analistas consultados por Thomson Reuters.
La empresa con sede en Kioto elevó su previsión de ganancias para el año que finaliza en marzo a 160,000 millones de yenes, desde los 120,000 millones de yenes, frente a la estimación de los analistas de 144,000 millones de yenes.
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Las ganancias anuales de la compañía llegaron a un récord de 555,000 millones de yenes en el año hasta marzo de 2009, impulsadas por las ventas de Wii.
Nintendo, que depende en gran medida de Switch para impulsar sus ganancias, busca diversificar sus fuentes de ingresos moviéndose a nuevas áreas como juegos de teléfonos inteligentes y parques temáticos con su lista de personajes populares.
Sin embargo, estos esfuerzos en los juegos para smartphones han producido resultados mediocres. Pokemon GO fue un éxito fenomenal, pero Nintendo recibe ganancias solo a través de un afiliado que desarrolló el juego con un spin-off de Google -una empresa nacida a partir de otra mediante la separación de una división subsidiaria-.
“El negocio de los teléfonos inteligentes aún no se ha convertido en un pilar de ganancias para Nintendo”, dijo Kimishima. “Todavía tenemos mucho por hacer”.