En los últimos meses, General Electric ha estado vendiendo y dividiendo unidades de negocios de izquierda a derecha.
Tan solo ayer, la compañía anunció la venta de su unidad de motores industriales a la firma de capital privado Advent International. Y hoy, la compañía anunció que está abandonando su unidad de atención médica y renunció a su participación en la compañía de servicios petroleros Baker Hughes.
Todo esto se produjo después de una serie de meses desastrosos para el negocio, incluidos los ingresos perdidos, la reexpresión de ganancias pasadas y la caída del Dow. Pero este desprendimiento de las unidades e intereses comerciales no es nada nuevo: comenzó bajo el ex presidente ejecutivo Jeff Immelt, que se deshizo de los negocios de capital, plásticos y electrodomésticos de GE, así como su participación en NBC.
Ante esta situación, ¿qué queda de GE? A continuación un listado:
- Aviation. GE Aviation continuó siendo una de las unidades con mejor rendimiento en la compañía, incluso cuando otras y la compañía en su conjunto luchaban por cumplir los objetivos. En 2017, el CEO de GE Aviation, David Joyce, fue el único ejecutivo en recibir un bono en reconocimiento a su excelente trabajo, incluso cuando los demás ejecutivos le quitaron los bonos. Según un comunicado de la compañía, la tecnología de GE impulsa dos de cada tres salidas de aerolíneas comerciales en todo el mundo.
- Power. GE Power es una unidad interesante para invertir. Luego de la adquisición poco costosa del competidor francés Alstom en 2015, el negocio se ralentizó y se recuperó poco a poco. En diciembre, General Electric Power despidió a 12 mil personas e incluso el CEO John Flannery se pronunció en contra de la unidad, diciendo “hemos exacerbado la situación del mercado con una ejecución realmente pobre”. Pero la compañía ve la unidad como una parte esencial de su estrategia energética general .
- Energía renovable. En quizás la parte más futurista de GE, la empresa planea enfocarse en la energía renovable para mejorar su oferta general de energía. GE es bien conocido por sus turbinas eólicas y ha participado en proyectos de energía eólica en todas partes, desde Irlanda hasta Australia. Sin embargo, la compañía también cometió algunos errores fatales en su estrategia de inversión en energías renovables. Por ejemplo, con la compra de Alstom, General Elecyric duplicó los combustibles fósiles cuando los mercados favorecían las fuentes de energía renovables. Quizá hacer de la energía renovable un pilar de su nueva estrategia es un intento de limpiar ese pecado.
La aviación, la energía y la energía renovable en conjunto representaron más de la mitad de los $122 mil millones en ingresos de General Electric el año pasado, según The Wall Street Journal. El gerente general de GE, John Flannery, dijo en un comunicado que estas tres unidades son “empresas altamente complementarias preparadas para el crecimiento futuro” y que centrarse en ellas ayudaría a la compañía a “continuar mejorando nuestras operaciones y balances a medida que hacemos GE más simple y fuerte”.
Por Hallie Detrick