La continuación de la volatilidad del tipo de cambio y, a mediano plazo, un probable incremento de precios en el mercado interno es el efecto más tangible tras el anuncio de los nuevos aranceles a las importaciones de acero desde México, Canada y la Unión Europea, apunta en un comunicado la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Ante ello, el gobierno tomó acciones incrementando los aranceles a los alimentos que Estados Unidos importa de México. Las reacciones se hicieron presentes, y mientras para algunos fue una decisión poco adecuada, para otros fue certera.
Entre los últimos se encuentran José Manuel Márquez y José Nabor Cruz, especialistas del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM, quienes consideraron adecuada la reacción “espejo” del gobierno mexicano de imponer medidas equivalentes a diversos productos que se comercializan con nuestro país vecino.
También lee: Los aranceles y el aluminio, ¿se avecina una guerra comercial?
Dijeron que esta reacción de Donald Trump es más una medida de presión para la renegociación del TLCAN y para la Unión Europea, con quien busca una disminución de los impuestos a los autos que comercializa en esa región.
Los investigadores indicaron que la imposición de aranceles también representa un mensaje hacia los electores de EE.UU., para mostrar que está cumpliendo con su promesa de campaña de proteger a las industrias acerera y automotriz de su país, así como los empleos que generan ambos sectores.
La medida se da en el marco de la renegociación del TLCAN para forzarlo un poco más, y el consecuente posicionamiento de México fue el adecuado, José Nabor Cruz
LOS ARANCELES, ¿UNA OPORTUNIDAD PARA LOS BLOQUES COMERCIALES?
El mundo se constituye por bloques comerciales: Estados Unidos, Sudamérica, Unión Europea y China; en este contexto de una posible guerra comercial, quien ha dado los primeros golpes ha sido Estados Unidos, dijo Cruz.
Es una apuesta de Trump, quien “busca aislarse, desplegar el proteccionismo en su país. Pero esta situación podría ofrecer una ventana de oportunidad a los otros bloques (Unión Europea y China) para aumentar el intercambio con México y Latinoamérica”.
A partir del segundo semestre de 2017, el INEGI reportó que las exportaciones de México hacia la Unión Europea, y a otros mercados como Sudamérica, crecieron casi al triple en comparación con las que se realizan con Estados Unidos, subrayó el investigador.
Además, el gigante asiático apuesta por incrementar el comercio con México, quien también podría establecer esa carta durante la renegociación del TLCAN.
También lee: ¿Vendrá una guerra comercial entre China y Estados Unidos?
Por otro lado, una vez se lleven a cabo las elecciones de noviembre próximo en Estados Unidos, Trump podría retroceder en su decisión y retomar ciertos acuerdos en la revisión del TLCAN (proceso que podría extenderse hacia 2019) o salirse del acuerdo comercial, señaló José Manuel Márquez
De desdecirse de esta medida, el presidente estadounidense restaría credibilidad a sus acciones y podría ser visto como una debilidad de negociación, en tanto que la Unión Europea podría tomar más fuerza de negociación con México, basada en los principios de la Organización Mundial de Comercio.
También lee: Los 11 países que exportan más acero a Estados Unidos