La startup chilena habla de las ventajas de competir contra titanes “lentos”.
Cornershop hace el súper por ti y lo entrega a domicilio con la promesa de envío gratis si llega después de 60 minutos. Aun así, la startup chilena no quiere comerse al mercado latinoamericano de delivery on-demand -al menos por el momento-.
FORTUNE: Respecto a la inversión que recibieron este año, ¿cuáles son los siguientes mercados dentro y fuera de México donde quieren incursionar?
Daniel Undurraga: Somos una empresa con vocación latinoamericana. Los fundadores hicimos antes una empresa llamada Clandescuento, que después fue adquirida por Groupon y se estableció en ocho países de Latinoamérica.
Es muy probable que con Cornershop podamos llegar a mercados similares, pues estamos familiarizados con ellos, especialmente Brasil, Argentina, Perú y Colombia. Pero no tenemos ningún apuro por abrir en más países porque estamos creciendo muy bien donde ya estamos (Chile y México).
Más que país a país, crecemos orientados en ciudad a ciudad.
Para nosotros, abrir Mérida o Acapulco implica más o menos el mismo trabajo que abrir Coquimbo, en Chile. Eventualmente abriremos en más países, aunque sin una gran presión para hacerlo pronto.
F: Al abrir en más ciudades, ¿hay alguna limitante sobre qué tan bien urbanizadas estén o si tienen algún problema de movilidad?
DU: No nos fijamos mucho en eso. Nosotros abrimos donde creemos que hay mercado y donde la gente nos pide el servicio.
Hay ciudades que son más problemáticas que otras. Creo que de todas las ciudades problemáticas, ésta (la Ciudad de México) es una de las principales porque es enorme, tiene muchísimo tráfico y hay calles completas que parecen un estacionamiento a ciertas horas.
Si en una ciudad así -una de las más grandes del mundo, con más autos y distancias enormes- fuimos capaces de resolver estos problemas y de desarrollar la tecnología necesaria para llegar a la hora, de manera consistente y puntual, no veo que vayamos a tener mucho problema en otro lado.
Daniel Undurraga, CEO de Cornershop. / Foto: Gabriel González
F: ¿Cuáles son los retos del mercado a los que sigue enfrentándose Cornershop?
DU: En el rubro de delivery, donde estamos nosotros, el principal reto sigue siendo la logística.
Cornershop te promete una entrega de 60 minutos -a menos que hagas un pedido muy grande-, y todo lo que pasa para que llegue en ese tiempo es muy complejo.
Se toman miles de decisiones en tiempo real mientras entran miles de pedidos.
Daniel Undurraga
Se toman miles de decisiones en tiempo real mientras entran miles de pedidos y el algoritmo está eligiendo si tu pedido lo va a llevar uno de nuestros shoppers en bicicleta que lleva tres meses trabajando en Cornershop o uno en auto que lleva dos años.
Esto se determina por las características que tiene el pedido en cuanto al tamaño, peso, cuántas veces ha ordenado el cliente, etcétera.
Creo que nuestros consumidores esperan que el servicio sea cada vez mejor. La mayoría son familias, gente que nos pide pañales y cosas de ese tipo.
Cuando se trata de una mamá que tiene niños pequeños, por ejemplo, uno no puede llegar tarde ni atrasarse.
Es por eso que hemos puesto énfasis en la logística, aunque sea un gran reto.
F: Con esta promesa de entrega en 60 minutos, el modelo de cobrar extra por un delivery más rápido prácticamente ya no podría funcionar en el país si alguien quisiera hacerlo, ¿fue esta una estrategia para futuros competidores o de dónde surgió la necesidad de enviar las cosas tan rápido?
DU: La tecnología avanza, ya casi vamos a colonizar Marte, pero hay cosas que no cambian: los marcianos también van a preferir que les lleguen las cosas más rápido, más barato y con mayor calidad. La gente siempre quiere todo esto.
¿Que cuánta gente está dispuesta a pagar un poco más para que les llegue más rápido? Eso ya es un poco más difícil de responder.
Nosotros comenzamos enfocándonos en la gente que sí quiere el servicio rápido, independientemente de que si fuese un poco más caro. Hoy este servicio ya es masivo. Al ya tener el mismo precio (de los productos) en la app y en tiendas como Chedraui y HEB, podemos tener promociones con empresas.
Cada mes, éstas pagan para regalarle el envío a clientes que agreguen sus productos al carrito. Cuando se juntan estos factores, nuestro servicio ya no es solo más conveniente y rápido, sino más barato.
F: ¿Cómo es que una startup puede competir en un sector donde hay empresas que tienen a equipos muy grandes trabajando en el mismo tema?
DU: Justo porque éstas son muy lentas. Son como un trasatlántico que va hacia un lado; cuando se quiere mover a otro, no puede hacerlo rápido por la inercia de toda su gente y sus procesos.
Una empresa como Cornershop solo se enfoca en las cosas que agregan valor y procesos que aportan a que la experiencia del cliente sea mejor.
Las startups suelen tener mucho menos gente que los departamentos de e-commerce de una compañía grande, y nosotros estamos creciendo mucho más rápido. Al final, también iremos virando algún día, aunque espero que para entonces tengamos los procesos necesarios, sin burocracias que se interpongan en la experiencia final del cliente.