Enrique Majós, primer CEO de Gentera, busca una solución en esta industria para atender a un sector carente de servicios financieros y tecnología.
La primera experiencia que tuvo Enrique Majós en Compartamos Banco fue como practicante profesional en 1992. En aquella época, sólo eran 30 personas participando en la organización, “la mitad voluntarios y la mitad trabajando”, recuerda.
Estuvo ahí dos años antes de irse a hacer una maestría; aunque su vínculo con el banco nunca se perdió. “Trabajé 10 años en Citibank, y en 2004 vuelvo a Compartamos a la dirección de Mercadotecnia”.
Después de eso, fungió primero como director comercial y luego como director general antes de pedir la dirección de Fiinlab en 2016.
En ese año, el fortalecimiento del Fintech en México estaba en su apogeo. Empresas como Kueski y Konfío iban a la cabeza de la innovación en micropréstamos; Kubo y Fondeadora, por su parte, en crowdfunding; en tanto, Clip y Sr.Pago en canales de pago.
Si bien en las microfinanzas del mercado inmediato de Gentera aún no existían competidores significativos, Majós se dio a la tarea de observar y analizar al ecosistema con detenimiento.
“Quizá si no hubiéramos visto las iniciativas y la fuerza con la que los actores Fintech lanzaban las propuestas de sus nuevas soluciones”, afirma el hoy primer CEO de Gentera, “nosotros no hubiéramos despertado como lo estamos haciendo ahora”, agrega en entrevista para la edición de noviembre de la revista Fortune en Español.
Ese despertar fue abrupto y se cristalizó con la rápida creación de Fiinlab en enero de 2016.
Desde agosto de 2017, Majós reporta a directamente a Carlos Danel y a Carlos Labarthe, presidentes y fundadores de la organización, quienes decidieron crear la posición de CEO para continuar con el crecimiento de la organización.
Fiinlab, el laboratorio para experimentar
Fiinlab no es una incubadora, un fondo de inversión o un espacio de coworking. La manera en que Majós lo describe es como “el socio estratégico para el emprendedor Fintech que se dedica a la inclusión financiera”. La propuesta es un espacio donde tengan cabida iniciativas para empresas Fintech en distintas etapas.
Por un lado, Fiinlab tiene proyectos intrapreneur, aquellos que se desarrollan dentro de Gentera para mejorar la experiencia de sus propios clientes y procesos en el banco. Por otro, ofrece apoyo a modelos externos de negocio Fintech que estén buscando desarrollarse.
Majós estuvo a cargo de la planeación y lanzamiento de Fiinlab.
Además de fondeo y networking, lo más atractivo que brinda es el acceso al mercado y los clientes de Gentera para probar o escalar modelos de negocio.
“Al tener la capacidad de darles conexión al banco y de hacer alguna prueba de experienciade usuario con nuestros clientes, en Fiinlab podemos apoyar a las Fintech para alcanzar un mayor nivel de madurez”, asegura Majós. Si hay empresas que ya comprobaron su hipótesis y están en etapa de escalamiento, Fiinlab también puede apoyar con fondeo.
“Emitimos vehículos de deuda y si eso eventualmente conviene a ambas partes; invertimos en ellas o nos volvemos socios”, agrega. Majós estuvo a cargo de la planeación y lanzamiento de Fiinlab teniendo en mente una transformación contundente para Gentera.
Aumenta la competencia
Desde Compartamos Banco no sería fácil hacerlo, pues una institución de ese tamaño no tiene la agilidad para moverse tan rápido. (Compartamos atiende a más de 3.7 millones de clientes en 820 oficinas de servicios y sucursales en México, Perú y Guatemala).
Esta limitación de movimiento explica por qué otras instituciones bancarias con presencia en México han optado por incorporar innovaciones tecnológicas mediante spin-offs o han adquirido otras startups Fintech.
BanregioLABS, una división de Banregio, busca encontrar soluciones para sus clientes al “redefinir las reglas de la banca en México”, como establece su propio sitio Web.
Desde un inicio, BBVA se posicionó como un jugador importante: ha realizado nueve ediciones de BBVA Open Talent, el reto de Fintech más grande para startups del sector en todo el mundo.
Scotiabank Partners anunció una colaboración con la aceleradora argentina NXTP Labs para acceder a las empresas Fintech más prometedoras de México, Colombia, Chile y Perú que puedan impulsar su transformación digital.
Desde 2014, Santander opera un fondo de 100 millones de dólares para madurar empresas Fintech desde sus etapas iniciales. Finalmente, en 2015 Citigroup abrió Citi FinTech, unadivisión enfocada en hacer que el modelo de negocio del banco esté enfocado completamente en el uso del smartphone.
Entre tanto movimiento de grandes bancos enfocado en Fintech, el de Gentera, según Majós, responde a otra dinámica importante que ha ocurrido en el sector. Si antes la percepción en los principales hubs y reuniones de Fintech era que las startups buscaban sustituir al sector financiero tradicional, el discurso actual es muy distinto.
“El consenso que hoy escucho es: ‘¿cómo le hacemos para trabajar juntos?’”, afirma Majós. “Con base en esto, nace Fiinlab con este espíritu de colaboración desde un inicio”. El mismo mercado explica este cambio de discurso.
El problema de las startups –independientemente si están o no enfocadas en Fintech– es que buscan primero encontrar un buen producto, después probarlo con el cliente, y luego esperar a que éste lo acepte y reciba bien. Después viene lo difícil: escalar el modelo.
“En Fiinlab podemos apoyar a las empresas Fintech para alcanzar un mayor nivel de madurez”, dice Enrique Majós. Foto: Alfredo Pelcastre
El prototipo de una plataforma de reconocimiento de fraudes puede estar muy bien desarrollado, pero no sirve de mucho si al ejecutarse no es compatible con una considerable cantidad de usuarios.
Las APIs –o Programas de Aplicación de Interfaces, por sus siglas en inglés– son clave para la interacción de estas aplicaciones de software, además de una de las bases del ecosistema Fintech a nivel global.
En 2016, en plena consolidación del ecosistema, las Fintech reconocieron “que están hechas para colaborar con las instituciones financieras tradicionales”, señala Majós.
NOTA DEL EDITOR: Este artículo se publicó en la edición de noviembre de 2017 de la revista Fortune en Español. Es el segundo de tres extractos de la entrevista a Enrique Majós, CEO de Gentera. Puedes leer la primera parte aquí