El 2017 no fue un año muy grato para el fabricante de juguetes danés. Estas son sus cifras.
Lego, la compañía danesa de juguetes, anunció este martes que sus ventas cayeron un 8% a 35,000 millones de coronas danesas (5,800 millones de dólares).
La caída pone fin a 13 años de crecimiento, limitado por un incremento del 25% en 2015 y un crecimiento del 6% en 2016.
El CEO de Lego, Niels B. Christiansen, manifestó en un comunicado que la caída se produjo principalmente en los mercados establecidos y causada por el exceso de inventario.
En el 2000, Lego estuvo al borde de la bancarrota.
Un portavoz agregó que el exceso de productos en existencia, que tuvieron que venderse a bajo precio, impidió que los juguetes nuevos llegaran al mercado de manera oportuna y expresó que hoy “el comercio de juguetes está impulsado por la novedad”.
La caída no es una sorpresa después de un intempestivo 2017.
En agosto, el anterior CEO de la compañía, Bali Padda, se hizo a un lado después de solo ocho meses de servicio, la razón que argumentó en aquel momento fue debido a su edad.
En septiembre, la compañía anunció que recortaría 1,400 empleos y el 8% del personal para fin de año. Esta medida fue tomada en medio de una crisis en las ventas.
El lanzamiento de la serie de Lego ‘Mujeres de la NASA’ antes de las vacaciones de Navidad proporcionó un éxito tardío, pero evidentemente no fue suficiente para cambiar el rumbo de la empresa.
Pero no todas son malas noticias. La empresa experimentó un crecimiento de dos dígitos en China y las caídas en los mercados establecidos no se debieron a la disminución de las ventas de los consumidores, sino al valor de esas ventas.
La compañía no es ajena a una mala racha, ya que a principio del 2000 estaba al borde de la bancarrota y hasta el año pasado había tenido una racha de crecimiento de 13 años.